TIEMPO DE CUARESMA

 ENAMORATE 

Este miércoles pasado, casi sin darme cuenta, por pura coincidencia, comenzaba la Cuaresma dándole gracias a Dios por todos los hermanos de nuestra Hermandad. En nuestra parroquia, delante del sagrario, mirando a los ojos al nazareno del Consuelo, juraba que daría hasta la vida por amor. Un San Valentín muy especial que presentaba ante mi preguntando, ¿cuánto de enamorados estamos de nuestra hermandad? No tengo más que contaros, no tengo nada más que aportar a esta reflexión, solo esto, repitiéndoos la misma pregunta: ¿Cuánto te enamora tu hermandad? ¿Cuánto de enamorados estamos de Dios? ¿Por qué es así? 

Después de tantos días de trabajo, de esfuerzos, de sinsabores y fatigas, de falta de sueño, de no ver a la familia, de críticas e incomprensiones… ¿por qué nos enamora tanto nuestra hermandad? ¿Qué hay en ella para que la queramos tanto? Viendo la cara de los míos, alcance la respuesta: me enamora, porque en cada uno de ellos está el Señor y por ellos es por lo que pido y doy gracias al Padre. Quizá podamos pensar que la culpa de que una hermandad sea más atrayente o no, es gracias a las juntas de gobierno, al trabajo de los mayordomos, como se vistan las imágenes, la banda que toque a nuestro paso o las flores que lleve puestas… Y piénsalo, pero creerlo así es una equivocación. La rica herencia de nuestras hermandades no se ve, no radica en su patrimonio artístico, ni forma parte de su manera de procesionar o de montar altares de culto, sino que vive gracias al corazón de sus hermanos, al amor de Dios hecho carne en cada uno de ellos. Personas que, poco a poco, se han ido enamorando de su cofradía, a quienes se le nota en el brillo de su mirada y donde se entiende que, gracias a Dios, todo esto funciona por culpa de esa simple realidad.

Que grato comenzar este tiempo de reflexión y penitencia, sabiendo la respuesta, sabiendo donde está Dios, sintiéndonos queridos por Él… ¿Qué más puedo pedir? No lo dudes, en esta Cuaresma, en este camino hacia Dios Resucitado, enamórate de tu hermandad, enamórate de tu Iglesia. Aquí encontrarás la respuesta.

D. Jesús Guerrero García

Hermano Mayor de la Hermandad del Pusillus Grex



No hay comentarios:

Publicar un comentario